Estamos programados para ser ricos o para ser pobres. Programados por un montón de creencias que nos han ido diciendo a lo largo de nuestras vidas: «el dinero no crece en los árboles», «para tener dinero hay que trabajar», «el dinero no es importante»…
Tuve la suerte de crecer en una familia de emprendedores. Entre mis abuelos, mis tíos, primos y hermanos, quienes no emprendían no eran suficientemente ricos. Está en nuestros genes.
Gracias a crecer en este ambiente, me crié escuchando conversaciones que, muchas veces, giraban en torno a los negocios y al dinero. En mi caso, crecí con un paradigma de abundancia, con la creencia de que tener dinero no sólo es bueno, sino que es importante. Crear dinero es bueno.
Pero hay muchas personas que no tienen la misma suerte, que han vivido años escuchando creencias limitadoras que quedan grabadas en sus mentes.
¿Cuál es la diferencia entre las creencias millonarias y las que ponen límite a tu riqueza?
- Los ricos piensan: «Yo creo mi vida«. Los pobres, que «la vida me pasa a mí». La gente con éxito siente que tiene el control de su vida, mientras que la gente pobre suele ser infeliz y quejarse siempre de esto o lo otro que no les deja hacer algo que quieren.
- La gente rica juega el juego del dinero para ganar. Los pobres juegan el juego del dinero para no perder.
- Los ricos se han comprometido a ser ricos. Los pobres sólo quieren ser ricos (pero no hacen nada para lograrlo).
- La gente rica piensa en GRANDE. La gente pobre piensa en pequeño.
- Los ricos se centran en las oportunidades. Los pobres, en los obstáculos.
- La gente rica admira otra gente rica y exitosa. La gente pobre detesta a la gente rica y exitosa.
- La gente rica camina con gente positiva, exitosa. La gente pobre camina con gente negativa o sin éxito.
- Los ricos están dispuestos a promocionarse a sí mismos y su valor. La gente pobre piensa negativamente acerca de la venta y promoción.
- La gente rica es más grande que sus problemas. Los pobres se dejan vencer por sus problemas.
- Los ricos son excelentes receptores. A los pobres no les agrada recibir.
- La gente rica opta por recibir el pago basado en resultados. La gente pobre opta por recibir el pago basado en el tiempo.
- La gente rica piensa «lo quiero todo». La gente pobre piensa «o lo uno o lo otro».
- Los ricos se centran en su patrimonio neto. Los pobres se centran en sus ingresos de trabajo.
- La gente rica administra bien su dinero. Los pobres administran mal su dinero.
- La gente rica hace que su dinero trabaje duro para ellos. Los pobres trabajan duro por su dinero.
- Los ricos actúan a pesar del miedo. La gente pobre deja que el miedo los detenga.
- Los ricos aprenden y crecen constantemente. Los pobres piensan que ya lo saben todo y dejan de aprender.
¿Qué eres tú, un rico o un pobre?
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