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Llevas meses sin trabajo y en el INEM ya es que no te dan más opciones. ¿Pasa algo malo contigo? ¡Nadie te quiere contratar! Una cosa es no conseguir un trabajo normal, pero ahora que estás más o menos desesperado no hay trabajos a la vista. Ni siquiera en McDonalds.
Una de las cosas malas de estar así es que te estresas tanto que no puedes ni concentrarte en ganar dinero en Internet. Ni hablar de mantener un negocio online.
Te dan algunos buenos consejos: sé paciente. Persiste. Sigue intentándolo. Son consejos excelentes, pero ¿y qué si necesitas el dinero ya?
Si sabes escribir bien, puedes empezar a trabajar como freelance desde casa. Un escritor freelance no escribe por contrato, sino por proyectos.
Ganar dinero escribiendo artículos es viable. Si puedes escribir dos artículos por hora, cobrando 5 dólares por artículo, tendrías 80 dólares por 8 horas de trabajo. No tienes que ser un excelente escritor para cobrar por escribir. Si eres medianamente bueno, habrá trabajo para ti.
Ofrécete en foros de bloggers, en TrabajoFreelance.com y en servicios parecidos. También podrías crear un blog gratuito en Blogger y colgar algunos artículos de muestra. Podrías vender tus servicios desde ese mismo blog.
Una vez que tengas una base de clientes, puedes expandir tus servicios. Reinvierte tu dinero en herramientas que podrán ayudarte a ofrecer más y mejores servicios.
Ya sé que escribir artículos no suena a diversión total, pero si necesitas el dinero, es una excelente manera de conseguirlo con rapidez.
Hacer una lista con tus otras habilidades también será de ayuda. Muchas veces quienes te contraten necesitarán ayuda extra para configurar sus blogs, investigar temas o para traducir textos.
Hace años necesitaba a alguien que me ayudara a escribir artículos para uno de mis blogs. Contraté a una chica argentina para que escribiera 15 artículos. Me gustó tanto, que le pagué para que siguiera escribiendo un artículo semanal. Ahora, además de escribir para mí, se ha convertido en mi asistenta personal y le pago un buen dinero cada mes. Sé que ella está contentísima y estoy seguro de ser uno de sus mejores clientes. ¿Y todo por qué? Porque demostró ser buena y de confianza desde el principio.
